Ninguno de nosotros tenemos la más mínima duda al afirmar que un producto se compra por la utilidad que ofrece al consumidor. Claro que sí. Pero el problema (para la empresa que vende el producto) es que el producto, tú producto, no solo lo vendes tú, sino que lo más probable es que lo vendan muchas más empresas. Entonces, ¿qué podemos hacer para que compren nuestro producto y no el de la competencia? ( se pregunta la empresa)

Partiendo de la afirmación de que nuestro producto ofrece la mayor calidad y garantía para los consumidores, utilizamos los mejores materiales e ingredientes en su elaboración, tenemos un servicio de atención al cliente óptimo, y muchos más etcéteras que se nos ocurran sobre lo bueno que es nuestro producto, actualmente hay un factor que no debemos descuidar.

Si queremos vender más, diferenciarnos de la competencia y que incluso nuestro producto se considere mucho más que un producto, y sea toda una experiencia, el arte del packaging, puede ser la respuesta.

El packaging, que podemos definirlo de una manera sencilla como el envase, el embalaje, la etiqueta de los productos para su embalaje y venta, no podemos descuidarlo. Vivimos en una sociedad en constante cambio, donde cada día los usuarios nos dejamos llevar por miles y miles de imágenes, de nuevos productos, de diferentes sensaciones, de deseos por tener lo nuevo, y donde una imagen vale más que mil palabras.

Así que si unimos esta afirmación, nosotros como empresa no debemos descuidar ni lo más mínimo cómo presentamos nuestro producto. Y es que el packaging es la primera imagen que ve tu potencial consumidor, y debe comunicar, atraer y diferenciarte del resto.

 ¿Nunca has comprado nada por el envase? Yo sí, lo confieso…y además muchas veces, sobre todo cuando no conocía el producto, y presentaba un envase atractivo. Las empresas lo saben, cada vez más, y cuidan hasta el más mínimo detalle ofreciéndonos productos con unos envases, unos envoltorios, etiquetas, que nos encantan y que se convierten en objetos decorativos, en pequeñas obras artísticas.

Pero lo más importante es que gracias a los buenos diseños en packaging, es que las ventas aumentan. Pero claro, para ello, los diseños deben cumplir una serie de características, como son: ser atractivo, debe adaptarse al público objetivo, debe diferenciarnos del resto de productos similares, y por supuesto destacar nuestras ventajas.

Como viene siendo habitual, quiero mostraros algunos de los packaging que más me gustan, y os invito a que nos mostréis los que más os gustan y los compartáis con todos. Y por supuesto, mucho más en nuestro Pinterest.